El aporte del sector agropecuario en el 2008

En el ciclo 2006-2007 el aumento de las producciones y el buen precio de los granos significaron para el país un ingreso superior a los US$ 7.500 millones del ciclo anterior. Pasamos de US$ 22.000 millones a US$ 29.500 millones; esto le generará al nuevo gobierno un ingreso adicional de US$ 1600 millones de retenciones a la exportación.

Autor: ARTURO NAVARRO - 31/10/2007



   El tesoro nacional recibirá en el 2008 un monto total de US$ 6.500 millones sólo por las retenciones, sumados a los otros impuestos que generan la mayor actividad por los aumentos de producción.
   
   Para producir 95 millones de toneladas, el sector invirtió en el último ciclo 4100 millones de dólares para sembrar los cuatro principales cultivos. En la actual campaña, el sector va invertir más de 5.300 millones de dólares para comprar semillas, fertilizantes, agroquímicos, combustibles y pagar la mano de obra -no incluye maquinarias ni arrendamientos-.
   
   Es decir, que el sector tiene un aumento del costo -a valores de hoy- de US$ 1.200 millones: un aumento del 28%.
   
   A estos costos hay que agregarles los gastos por cosechar, acondicionar el cereal y transportarlo a los puertos. Hoy no podemos hacer un cálculo exacto del costo, porque las tarifas de los combustibles y la energía van a ser actualizados en el momento de cosecha. La suba del petróleo, además, va a encarecer significativamente los fletes internacionales.
   
   Por lo tanto, para evitar seguir cometiendo errores con las políticas para el sector agropecuario, habrá que analizar no sólo el aumento del precio de los granos en el mercado internacional, sino los márgenes netos finales que tendrían los cultivos, antes de aumentar las retenciones. Al mismo tiempo hay que evaluar muy bien cuál fue el incentivo principal que nos permitió superar la meta de 95 millones de toneladas en la ultima campaña y por el mismo incentivo esta previsto superar los 105 millones de toneladas para el ciclo 2007-2008, si se dan todas las condiciones climáticas y económicas necesarias.
   
   Ningún funcionario puede desconocer que el mayor incentivo para una tan exitosa performance, fue la rentabilidad del sector y que reinvirtió esos recursos para modernizar toda su estructura de producción. Quedó demostrado, una vez más, que el sector agropecuario responde principalmente al incentivo de precios cuando hay necesidad de aumentar la producción. Esta bonanza que genera la buena rentabilidad del sector permitió dinamizar todo el complejo agroindustrial y a todos los pueblos del interior, y permitió, al mismo tiempo, aportar importantes divisas para la actual recuperación del pais.
   
   Las preguntas que tendrían que hacerse estos mismos funcionarios antes de tomar cualquier medida serían las siguientes: ¿A cuánto podría haber llegado la producción y exportacion transformación de las mismas, si el empresario agropecuario hubiera recibido el precio integro del valor internacional, sin ninguna intervención del gobierno en sus decisiones? ¿Se ha evaluado que 10 millones más de toneladas a US$ 300 cada una, representa US$ 3000 millones más en el próximo ciclo, cifra que permitiría compensar las necesidades fiscales del Estado? ¿Por qué no definir que con parte de los mayores fondos que ingresan por las exportaciones se atiendan las necesidades sociales del 25% de nuestros ciudadanos que realmente lo necesitan, y no pretender seguir subsidiando a los 40 millones argentinos, poniendo retenciones a la exportación e interviniendo en las decisiones empresarias?
   
   El contexto internacional nos sigue acompañando, pero no hay que abusar de tanta suerte. Un aumento de las retenciones sería un mensaje totalmente negativo no sólo para el sector, sino para el interior del país. Es un impuesto muy fácil de poner pero muy difícil de sacar, sobre todo cuando va a gastos corrientes.
   
   Por su nivel de inversión anual, el sector agropecuario es el más importante. Por sus niveles de exportación, es el sector que más aportó al país, sin ningún subsidio estatal, a pesar de competir con los subsidios internos y externos. Está totalmente probado que si lo dejan trabajar con libertad y recibir el precio pleno internacional, estaríamos en condiciones inmejorables de aportar los mayores recursos que necesitamos, por mayores volúmenes de producción y sus transformación para exportar por intermedio del complejo agroindustrial mas eficientes y competitivo que tenemos en el país.---------------