Lo que hay que saber sobre la gripe o influenza aviar

¿Qué es la gripe aviar? ¿Se contagia al hombre? ¿Qué pasaría si llegase al país? ¿Se han registrado casos en la región? Estas son algunas de las inquietudes de la gente frente a esta enfermedad de las aves que, según alertan los medios, podría transformarse en una pandemia. Con el objetivo de informar de manera precisa y accesible compilé y sinteticé información oficial recabada en los sectores público y privado. A continuación, las respuestas a estas preguntas clave para cambiar alarma por información y conducta segura.

Autor: ARTURO NAVARRO - 29/07/2007



   ¿Qué es la gripe aviar?
   La influenza aviar es una enfermedad viral que se presenta en las aves de dos maneras: en forma de baja patogenicidad (con baja mortandad de aves) y de alta patogenicidad (con alta mortandad de aves). Generalmente está presente en forma de baja patogenicidad en las aves migratorias, sin que presenten síntomas apreciables. Por su condición migratoria, se atribuye a ellas el traslado de estos virus de región en región. El virus se transmite de ave en ave por medio de los aerosoles generados por su respiración.
   
   ¿Hay presencia de gripe aviar en Argentina?
   No, la Argentina no tiene ni ha tenido influenza aviar. Tanto nuestro país como los países limítrofes están libres de la enfermedad.
   
   ¿Se puede contagiar al hombre?
   Cabe aclarar que Estados Unidos hace más de 20 años, México hace 14 e Italia hace más de 100 años que conviven con aves infectadas de influenza aviar con el virus de baja patogenicidad. Y no ha habido ni un solo caso de transmisión al hombre ni mortandad ni de mutación del virus a su forma de alta patogenicidad (el identificado como H5N1).
   
   El virus de la influenza humana es distinto al de la influenza aviar, por lo tanto, el contagio al hombre se produce raramente en forma directa y muchas veces necesita huéspedes intermediarios, como es el caso del cerdo, en los que el virus muta hasta volverse un peligro para el hombre.
   
   Las probabilidades de que esto ocurra son muy bajas y aún menores si las costumbres de la gente en contacto con los animales no son de convivencia en el mismo ambiente, tal como ocurre en los países asiáticos, donde desde 2003 se registraron 60 muertes por este motivo. Allí la gente vive y duerme en contacto con patos, gansos y todo tipo de ave viva. Además, los hábitos de consumo son muy distintos a los nuestros: allí la carne se consume en forma muy fresca, por eso es normal que en los mercados el consumidor elija el pollo vivo que quiere consumir y ahí se lo decapite, desplume y entregue para el consumo. En Argentina está prohibida la comercialización de aves vivas.
   
   ¿Está preparado el país para la enfermedad?
   Argentina cuenta con un Plan Nacional de Control de la Gripe Aviar desde 1998, consistente en vigilancia permanente de las fronteras, de las aves migratorias, de las comerciales y de las aves de traspatio.
   El SENASA (el organismo nacional encargado de la sanidad animal) realizó en agosto un simulacro para el aislamiento y la prevención de su difusión para el hipotético caso de que apareciera un brote. Se entrenó y capacitó a profesionales y funcionarios con los procedimientos correspondientes para que Argentina siga libre de influenza aviar.
   
   No obstante los esfuerzos que se están realizando para impedir el ingreso de aves a través de las fronteras, se ha solicitado que se refuercen los controles en el nordeste. Entendemos que en esa zona hay muchos puntos por los que podrían ingresar productos que pondrían en riesgo nuestro status sanitario de país libre.
   
   La Secretaría de Agricultura de la Nación ha realizado numerosas reuniones informativas en distintas regiones productoras avícolas del país, para que los productores aumenten las condiciones de bioseguridad de sus granjas.
   
   Las dos cámaras que representan a los productores de pollo y de huevo, el Centro de Empresas Procesadoras Avícolas (CEPA) y la Cámara Argentina de Productores Avícolas (CAPIA), mantienen continuamente informados a sus asociados sobre la situación y los concientizan sobre la necesidad de extremar las condiciones de bioseguridad de las granjas para impedir la entrada del virus a sus explotaciones.
   
   Por su parte, las dos organizaciones de profesionales vinculados a la avicultura, la Asociación de Veterinarios de la Industria Avícola (AMEVEA) y el Grupo de Trabajo Avícola (GTA), mantienen reuniones mensuales de capacitación para sus asociados y colaboran con el programa de difusión de las autoridades y de las cámaras de productores.
   
   El Ministerio de Salud está trabajando anticipadamente en el almacenamiento del antiviral contra la gripe aviar por si llegara a aparecer algún brote, pero las posibilidades son mínimas. En caso de que sea necesario, el Ministro de Salud de la Nación, Ginés González García, deslizó que la Argentina podría buscar los medios para producir la droga por fuera del sistema de patentes.
   
   Por otro lado favorece a la Argentina su situación geográfica. Está lejos de los países donde ya se registraron casos y esto es bueno ya que las distancias actúan como barrera al ingreso del virus. De todas formas, como medida preventiva, nuestro país va a participar en la estrategia mundial como si fuera un país de alto riesgo. Además contamos con un plan de contingencia para una eventual pandemia de esta gripe, con una red de laboratorios de referencia para identificar rápidamente el virus, cercar y evitar la propagación si se registra un caso.
   
   ¿Se pueden consumir productos avícolas?
   Por supuesto. No hay posibilidad de contagio de esta enfermedad a través del consumo de alimentos. Además cabe aclarar que en el hipotético caso de que apareciera la enfermedad en la Argentina, el virus se destruye por la temperatura, por lo tanto no habrá ningún peligro para el hombre que consuma productos avícolas ya que los mismos se deben cocinar para ser consumidos.
   Conclusión: hay que informar con responsabilidad y evitar sembrar dudas en la población sobre una producción estratégica para el país, particularmente, en la medida en que se trata de una carne alternativa, que nos permitirá exportar más carne vacuna. Tenemos que hacer saber a los consumidores que consumir pollos, huevos y sus productos derivados es seguro. La influenza aviar afecta solamente a las aves. Es una responsabilidad de la dirigencia en general difundir estas ideas para llevar tranquilidad a toda la población de que la Argentina no tiene este riesgo sanitario.