Cambio climático y el seguro agrícola.
Buenos Aires, 19 abril (Especial para NA, por Arturo Navarro*)- > - El calentamiento global es la elevación de las temperaturas > debido a las emisiones de gases de efectos invernadero. Aumentos > de lluvias en centro y norte del país, incremento de la duración y > frecuencia de sequías en el centro y norte del país, incremento de > la duración y frecuencia de sequías en el Oeste y el Sur, > multiplicación de eventos climáticos extremos e incrementos en las > enfermedades de los cultivos de granos.
Autor: ARTURO NAVARRO - 19/04/2014
> Estos son algunos de los efectos que ya se están haciendo
> sentir en la Argentina y que podrían repetirse con intensidad
> creciente en los próximos años o décadas, según el nuevo informe
> del Panel Intergubernamental de Cambio Climático que se presentó a
> principio de abril en Yokohama, Japón, según lo relata Nora Bar
> en un matutino porteño.
> Estos eventos vienen provocando incrementos de costos y
> grandes pérdidas en diferentes sectores. En especial, el sector
> agrario, el cual desempeña un papel fundamental en la economía del
> país.
> Por el cambio climático según el nuevo informe, habrá más
> inundaciones y sequías por lo cual es urgente implementar
> políticas de estado para cubrir los riesgos climáticos para todas
> las actividades agropecuarias y agroindustriales.
> La idea central de esta iniciativa que vengo difundiendo y que
> no practicamos, es que los productores tengan una cobertura
> integral por diferentes riesgos agropecuarios como poseen los
> países que planifican y diagraman pensando en el largo plazo.
> No le sirve al productor tener un Estado y una dirigencia que
> sigue actuando como bombero ante cada evento climático.
> Una política que proteja al productor y la agroindustria, la
> más importante y eficiente del país, debería diseñarse a través
> de dos instrumentos principales que ya se usan en todo el mundo.
> No hay que inventar el agujero al mate.
> 1. Política para incentivar el mayor uso de los seguros
> agropecuarios por medio de subsidio a la prima, para poder
> aumentar la cobertura del área sembrada al bajar el costo de la
> prima del seguro. De esa manera se iría cambiando la vocación
> aseguradora de los productores y proveedores de insumos, que son
> los directos damnificados. Dicho aumento se daría en las zonas
> extra pampeanas más pobres y en los productores más chicos.
> 2. Política para crear y administrar un Fondo Nacional
> Permanente por ley para atender todos los daños de los bienes no
> asegurables, fondo que atendería exclusivamente a los productores
> que tengan asegurados sus bienes asegurables.
> La idea es que deben tener premio quienes tienen vocación
> aseguradora, para ir generalizando un sistema público-privado que
> debe ser solidario, pero no obligatorio para que existan
> competencias entre las empresas aseguradoras.
> Los países con producciones agrícolas importantes,
> desarrollados y no desarrollados, aplican este tipo de políticas
> activas.
> En EEUU ya tienen coberturas que aseguran los ingresos
> proyectados del productor. Esto lo pudieron hacer porque hace años
> vienen trabajando por medio de una acción pública-privada en
> políticas que atienden los riesgos agrícolas.
> La nueva ley agrícola sancionada recientemente eliminó todo
> otros incentivo al sector agropecuario y dispuso exclusivamente
> mayores subsidios a la prima de los diferentes seguros que tienen
> por estados, zonas productivas y por productores.
> Mucho tuvo que ver en la decisión de los legisladores los
> buenos resultados en las últimas sequías que tuvieron los
> productores con seguro agrícola.
> En España se viene aplicando estas política desde el año 1978
> por el Pacto de la Moncloa y después de haber recorrido tantos
> años tienen un sistema consolidado, que cubre con subsidio en
> promedio el 50% de la prima al productor independiente y el 80%
> para los grupos de productores.
> Mientras que en China también han implementados políticas
> activas con la prima del seguro haciéndose cargo de un porcentaje
> cada parte: Un 33% lo paga el estado nacional; otro 33%, las
> provincias y el 33% restante el productor. Según la información
> el productor tiene un subsidio del 66%.
> El Brasil todos los años va asignando un mayor presupuesto para
> el subsidio de prima que van del 40% al 60% según los productores,
> con la limitación por productor de 51 mil reales.
> La estrategia es cubrir la mayor cantidad de pequeños y
> medianos productores que son a quienes hay que atender para evitar
> que salgan del sistema por algún evento climático. Es un sistema
> relativamente nuevo pero muy interesante conocerlo porque permiten
> actuar a todos los operadores y demandantes.
> Un país como Argentina que siembra más de 32 millones de
> hectáreas y que produce 100 millones de toneladas de granos
> manifiesta las siguientes contradicciones: (a) que los bancos
> oficiales sigan dando créditos sin seguro, (b) que se siga
> vendiendo insumos sin asegurar su cobranza con dicho instrumento y
> (c) que muchos productores inviertan sin tomar previsión alguna
> considerando que es una explotación a cielo abierto.
> Después, todos reclaman por los 500 millones de pesos del fondo
> de la obsoleta ley de emergencia agropecuaria, que no alcanza
> para atender al menor de los eventos que se viene produciendo con
> los cambios climáticos.
> Por lo tanto, la dirigencia agropecuaria tiene la
> responsabilidad de poner urgentemente este tema como una de las
> políticas de estado para el agro en la agenda nacional.
> No es por casualidad que los partidos políticos no le den
> prioridad a este tema en sus propuestas, si las entidades no lo
> proponen. Las consecuencias de los cambios climáticos están con
> nosotros, por lo cual hay que actuar en consecuencia sobre cómo
> atenuarlos en el sector agropecuario que invierte todo su capital
> a la intemperie.
> AN/MAF
> (*) Consultor