ESPERANDO EL SOJAZO.
La gran cosecha del Hemisferio Sur es bajista. No logra ser compensada por las mayores importaciones chinas. Esto significa caída en los precios, al ingreso de la cosecha en mayo, lo cual induce a una rápida liquidación de la soja disponible. El pase FOB es negativo en U$S/tn 53, cifra bastante parecida a la caída entre el disponible, a principios de marzo y el futuro-mayo.
Autor: JORGE INGARAMO - 16/03/2014
El físico o sea, la soja.
Pasamos por cuarenta días de seca y elevadísimas temperaturas que, a algunas plantaciones de soja, las perjudicó decisivamente. Por ejemplo, en La Pampa, Oeste y Sudoeste de Buenos Aires. Con las abundantes lluvias posteriores, se vio favorecida la soja de segunda y el llenado de granos de la soja de primera, que se había sembrado tarde.
De una cosecha que, originalmente se estimaba en MT 53, podríamos haber bajado a MT 49 y, finalmente, terminaremos gracias a los altos rindes de los implantes tardíos, en torno a los MT 54. El USDA mantuvo MT 54, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires subió de MT 53 a MT 54,5 y GEA de la Bolsa de Rosario postula MT 54,7. Es decir, un cosechón. Es record absoluto. Crucemos los dedos.
En el mundo habrá MT 18 adicionales, es decir un 6,7% de crecimiento; MT 10 (o sea un 10,6% adicional) se importará, principalmente por parte de China, que pasará de menos de MT 60 a MT 69 y está tratando de abastecerse en mayor proporción del Hemisferio Sur, ya que la soja Chicago le resulta cara y la nuestra abundante.
El USDA bajó la producción prevista en Brasil, de MT 90 a MT 88,5. Pero la noticia no fue bajista, porque los operadores ya habían descontado MT 88.
Hay ciertas perturbaciones, sobre todo en la soja de segunda, que podría enfrentar enfermedades de fin de ciclo, chinches e isoca. Hay casos relevantes que podrían agravarse y perjudicar el rinde nacional, algo superior a los qq/ha 27. Por ahora son puntuales y pueden ser tratados, siempre que no siga lloviendo de una manera excesiva, y se puedan llevar a cabo las tareas de cuidado de cultivos con fitosanitarios, para asegurar el rinde. Lo propio puede decirse (crucemos los dedos) para que, al momento de la cosecha, que es tan crucial para la soja, las lluvias no sean perjudiciales.
El negocio.
Suponiendo MT 54 y precios a cosecha (ver más abajo), el negocio soja dará casi MU$S 26.800, por exportaciones y más de MU$S 8.700 por Retenciones. Si se le adiciona el mercado local y se valúa el empleo de la semilla de uso propio, se llega a un negocio de más de MU$S 28.100.
El fisco debe estar contento, porque de los tres cultivos significativos de la gruesa, recaudará MU$S 9.630 (90,5% proveniente de soja) y comparando con el Dólar de mediados de abril pasado, adicionará (valores nominales) casi M$ 24.000 por soja y más de M$ 26.000 por los tres cultivos.
La experiencia de los dos últimos años muestra dos “modelos de liquidación”: a) en 2012, pleno cepo cambiario, la presteza de los productores, facilitó cinco meses, entre abril y agosto, de superávit comercial externo de MU$S 1.360 mensuales, mientras que b) en 2013, con formidable atraso cambiario, tasa de interés negativa y elecciones, sólo hubo tres meses de superávit de MU$S 1.240 (abril-junio).
Si al Central no le tiembla el pulso, este año debería parecerse a 2012, con el descuento de unos MT 2 (unos U$S M 1000) que ya ingresaron en febrero, por la vía de las pre-financiaciones que consiguió CIARA, para darle al BCRA oxígeno diario, por MU$S 85. Por eso hubo emisión neta de base, en febrero, de fuente externa.
Los precios.
El último informe del USDA fue bajista (se esperaban recortes mayores en el Hemisferio Sur) y hay malas noticias, geopolíticas en Ucrania y por el nivel de actividad económica en China. La resistencia de los productores argentinos a vender no impedirá la convergencia entre los precios del disponible y los de la próxima cosecha.
Sólo en lo que va de marzo, el disponible bajó U$S/tn 20 (de U$S/tn 355 a 335) y seguirá bajando, desde el cierre del 14 de marzo, a un valor mayo casi U$S/tn 25 inferior (U$S/tn 310,5). Es decir que el descuento entre el cierre del viernes pasado y la cosecha, es del 7,5% y, entre principios de marzo y cosecha, es del 12,5%.
A nivel internacional, en Chicago, las perspectivas son claramente bajistas, inducidas por las cosechas del Hemisferio Sur. El pase entre marzo y septiembre, en Chicago, es negativo en U$S/tn 53, mientras es U$S 7 positivo para maíz.
La soja FOB en La Argentina se vende hoy 5% más cara que hace un año y alcanza los U$S/tn 558, pero bajará U$S 53 a cosecha, pese a que el aceite (que ya se sabe no es la parte más importante de la formación de precios) bajará 11%. La proteína, cuya demanda es inelástica, dado su carácter de insustituibilidad, vale hoy 10% más que hace un año, pero bajará también U$S/tn 20, es decir un 4%, cuando entre la cosecha.
En síntesis, al haber muy buena producción en el mundo y sobre todo, en el Hemisferio Sur, la suba en las importaciones chinas no ha sido suficiente para evitar una tendencia bajista en los mercados. Por ahora, la proteína se ha salvado, como siempre, por la inelasticidad de la demanda, pero también deberá resignar posiciones ante la abundancia de la oferta sudamericana e indirectamente, por el prudente modelo de compras que lleva adelante China, en la provisión de sus granos (para molerlos ellos).